¿Qué dice la Biblia del fin del mundo?

Saludos entrañables a tod@s l@s que me seguís. En este contexto apocalíptico que el coronavirus está dejando, poniendo patas arriba todo lo que conocemos, puede ser interesante saber qué es lo que dice la Biblia del fin del mundo. Porque no me extrañaría que en los próximos meses surgieran los típicos agoreros anunciando que esta pandemia es el principio del fin de los tiempos. Haremos un recorrido cronológico, empezando por las cartas de San Pablo (los escritos más antiguos del Nuevo Testamento), continuando con los evangelios y terminando con el controvertido libro del Apocalipsis.
En la 1ª epístola a los Tesalonicenses (1 Tes 4, 13-18) -la más antigua- Pablo parece responder a una pregunta que le hacían los de Tesalónica: ¿qué pasará con los hermanos que han muerto antes de la venida de Jesús? Porque en todas las predicaciones "auténticas" de Pablo (ver post anterior para saber cuáles son) se manifiesta que la venida de Cristo es inminente. Concretamente podemos centrarnos en el siguiente fragmento:

"El Señor mismo, a la orden dada por la voz de un arcángel y por la trompeta de Dios, bajará del cielo, y los que murieron en Cristo resucitarán en primer lugar. Después nosotros, los que vivamos, los que quedemos, seremos arrebatados en nubes, junto con ellos, al encuentro del Señor en los aires. Y así estaremos siempre con el Señor." (1 Tes 4, 16-17)

En este texto, la llegada de Cristo está anunciada por ángeles tocando trompetas, imagen que volveremos a encontrar en el Apocalipsis. Después afirma que la resurrección afectará tan solo a los que hayan muerto con fe "en Cristo". Finalmente, los que estén vivos serán transformados (concordando con 1 Cor 15 51-52), supuestamente en seres espirituales, ya que en aquella época todo el mundo estaba de acuerdo con Aristóteles en que los seres compuestos de tierra y agua (como los humanos) están sujetos a la gravedad y no pueden elevarse por los aires. Quizás Pablo esté pensando en seres de fuego (imagen del Espíritu Santo en Pentecostés -Hch 2 3- y en otros lugares como Lucas 3 16), que según Aristóteles es más liviano que el aire y se eleva sobre él. En todo caso, claramente Pablo no está pensando en la restauración del Reino de Israel, en el sentido del reino mesiánico que esperaban la mayoría de los judíos, como hemos explicado en otro post. Aunque no se diga, por el contexto se deduce que los que se transformarán en seres espirituales son los que han creído en Jesús, ya que en Romanos 2 3-5 Pablo habla del "juicio de Dios" en el "día de la cólera", cuando sobre los impenitentes caerá un castigo que no se describe más que como "tribulación y angustia". Este tema de la "Cólera de Dios" es repetido hasta 8 veces a lo largo de la epístola a los Romanos (ver Biblia de Jerusalén on line) y siempre afirmando que Dios castigará a los transgresores de la Ley (es decir, a todos: Rom 5 12) salvo a los que se hayan acogido a la misericordia de Jesús (y por tanto sean misericordiosos), sin distinción de judíos o griegos.

En el evangelio de Marcos también se presenta inminente la llegada del Reino de Dios (Mc 9 1 y Mc 13 30). Hay que tener en cuenta que en la época en que se escribió se estaba desarrollando (o se había terminado recientemente) la Primera Guerra Judía (citada indirectamente en Mc 13 7), en la que miles de judíos fueron masacrados o esclavizados. El capítulo 13 de este evangelista constituye el primer Apocalipsis cristiano, describiendo en detalle el fin de los tiempos. El evangelista era testigo de que el evangelio ya estaba siendo predicado en prácticamente todas las naciones conocidas (desde Hispania hasta la India, y desde Escitia al norte hasta Nubia al sur), por lo que la condición expresada en Mc 13 10 ya estaba cumplida. Y el versículo Mc 13 14 parece hacer referencia a la destrucción del Templo en el año 70. En todo caso aquí, como en los demás escritos apocalípticos de la época, se mezcla sin distinción el pasado, el presente y el futuro haciendo profecías "a toro pasado" . Y luego, después de estas señales, anuncia una sacudida de las fuerzas cósmicas (Mc 13 24 y siguientes) cuando regrese el "Hijo del Hombre", misteriosa figura anunciada por el profeta Daniel, que se identifica con Jesús. Y, al igual que Pablo, Marcos explica que serán reunidos todos los creyentes de todas las naciones de la Tierra (Mc 13 27).

Si bien Mateo copia el apocalipsis de Marcos con muy pocos cambios, Lucas lo retoca, haciendo ver que el fin no es tan inmediato (Lc 21 9). Comparad por ejemplo Mc 13 6 (prácticamente igual que Mateo 24 5) con Lc 21 8, donde se añade "y el tiempo está cerca", para que los cristianos no hagan caso de los alarmistas que anuncian el fin de los tiempos. Sin embargo, por fidelidad, mantiene la afirmación (Lc 21 32): "No pasará esta generación hasta que todo esto suceda", que era la creencia general.

Como ya dijimos en el anterior post, la 2ª epístola a los Tesalonicenses desmiente a la primera, al afirmar que los "falsos profetas" son los que anuncian un fin cercano (2Tes 2 2). Hay que tener en cuenta que estos escritos más tardíos del Nuevo Testamento tratan de dar respuesta al aparente retraso de la Segunda Venida de Cristo. En esta 2ª carta a los Tesalonicenses aparece una figura misteriosa, el Impío (2Tes 2 3), que habrá de venir antes del fin para llevar a la apostasía a muchos cristianos. Y todavía no ha venido porque hay algo (2Tes 2 6, de género neutro) y alguien (2Tes 2 7, de género masculino) que lo retiene, y que los lectores conocen. Se ha especulado mucho respecto a la significación de este pasaje, pero sin ninguna conclusión clara. El Impío podría ser el emperador Nerón, lo que lo retiene pudiera ser el anuncio del Evangelio y el que lo retiene pudiera ser Pablo o Pedro. Una vez muertos estos a manos de Nerón, el emperador emprendió una persecución directa contra los cristianos. Dado que esta carta no se atribuye actualmente a Pablo, el autor de la carta jugaría con conocer todos estos hechos de antemano, ya cumplidos, y escribirlos como una profecía por cumplir. Pero es solo una hipótesis.

La 1ª carta de Juan 2 18 también habla de la venida de un Anticristo poco antes del fin del mundo, o muchos, si incluimos a todos los que han abandonado al cristianismo mayoritario, para unirse a otras tendencias tachadas de heréticas (1Juan 2 22). La 2ª carta de Pedro (quizás el escrito más tardío del Nuevo Testamento) continúa argumentando contra estos cristianos gnósticos, que negaban la Segunda Venida de Cristo, y en cambio afirmaban que los que mueren con fe se van al cielo -directamente- con Jesús. El autor de esta carta no puede ser el apóstol Pedro, pues fue compuesta como pronto en torno al año 100, pero quiso contar con la autoridad del apóstol para reforzar sus argumentos con el testimonio ocular (2Pe 1 16). En 2Pe 3 9, el retraso en la Segunda Venida lo justifica por la gran misericordia de Dios que quiere que todos los hombres se salven. En este mismo capítulo, el autor de 2Pe recuerda a sus lectores la consabida doctrina: primero habrá un tiempo de apostasía y luego una gran catástrofe cósmica (2Pe 3 10), con la novedad, quizás, de una restauración terrenal del Reino de Israel (si entendemos de ese modo el versículo 13).

Por último, analicemos lo que dice el Apocalipsis, libro que se supone compuesto durante el reinado de Domiciano, en la década de los 90 del siglo primero. Durante siglos hubo disputas en la Iglesia sobre si debía leerse este libro en la liturgia o no. El argumento principal en su contra era la aparición del Milenarismo o Reino de los Mil Años en el capítulo 20. Esta idea se basa en diversos escritos judíos, por lo que es dudoso que el Apocalipsis haya sido realmente el fruto de una visión, sino más bien el fruto de un estudio concienzudo, intentando combinar distintas profecías. El libro del Antiguo Testamento que más ha servido de base para el Apocalipsis ha sido el libro de Daniel. En el capítulo 7 aparecen bestias que representan reinos, cuernos que representan reyes y un Anciano, venerado por multitudes, que otorga todo poder a un Hijo de Hombre, que representa al Mesías. Dn 12 4 profetiza una resurrección final, pero no dice que resucitarán todos, sino (como hemos explicado en otro post) solo los justos que han de participar en la restauración del Reino de Israel. Los que han sido lavados y purgados de Dn 12 10 se refieren originalmente a los mártires del pueblo de Israel, pero aparecerán de nuevo en el Apocalipsis de Juan refiriéndose a los mártires cristianos. Por último en Dn 12 9 se dice que estas visiones están selladas, pero en el Apocalipsis se narra que los sellos son quitados y las visiones reveladas.

El Apocalipsis contiene muchas repeticiones de la misma escena, habitualmente tres veces o siete veces, números que tienen significado simbólico. Resumiendo mucho, y prescindiendo de los capítulos que describen la situación de las siete Iglesias (del 2 al 4), podemos sintetizar la visión del Apocalipsis del siguiente modo:

1. Dios entrega al Cordero un libro sellado con siete sellos (Ap 5 1). Una vez abierto el séptimo sello, se revelan unas visiones al profeta Juan. Los capítulos 6 y 7 describen un breve sumario de lo que se desarrollará después: es lo que está escrito en la cara externa del "rollo" (los libros en aquella época solían tener este formato) y es accesible a todos.  
Después de abrirse los seis primeros sellos (aún no es accesible el interior del rollo) se intercala la visión de los 144 mil elegidos (que representan al pueblo de Israel, 12000 personas por tribu) seguidos de una muchedumbre inmensa que han sufrido la gran tribulación, que puede referirse a la persecución de Nerón, o a la Primera Guerra Judía. Es decir, esta visión corresponde con las creencias más primitivas del pueblo de Israel, según las cuales los salvados se dividen en dos categorías: los de 1ª clase son los judíos genuinos y los de 2ª clase son los que también creen en el Dios de Israel, pero no se han circuncidado.

2. Todo lo que sigue hasta el final es la revelación del séptimo sello, que viene precedida por un gran silencio de expectación (Ap 8 1). Del capítulo 8 al 11 tenemos la visión de las siete trompetas, que amplifica las visiones de los siete sellos expuestas anteriormente, incluyendo un intermedio después de la sexta trompeta. De un modo parecido, cíclico, la séptima trompeta no tiene un contenido específico, sino que da lugar a la visión de las siete copas a partir del capítulo 15. Las plagas se inspiran en el Éxodo, haciendo ver que estas plagas nuevamente preparan la salida del nuevo pueblo de Dios de la esclavitud del nuevo Faraón: el Emperador romano. Pero estas plagas no son definitivas, porque solo un tercio de sus destinatarios resulta dañado. Es decir, todavía no es el fin. Los dos testigos (capítulo 11) parecen inspirarse en Zac 4 3 y Zac 4 14 (los dos olivos o los dos ungidos). Su interpretación es misteriosa: pudieran ser Moisés y Elías, pero también podrían ser Pedro y Pablo martirizados por Nerón.

3. El capítulo 12 parece ser el núcleo central del Apocalipsis: el combate entre el Dragón y sus seguidores, y el Cordero con los suyos. La Mujer que da a luz al Mesías, en principio, representa al pueblo de Israel (Sión es femenino), y a partir de la Edad Media empezó a identificarse con la Virgen María. El Mesías es arrebatado hasta Dios en el momento de su muerte y resurrección (no en su nacimiento) según se ve en Hch 2 34 que hace referencia al Salmo 110. El combate que viene a continuación se inspira en Génesis 3, donde la Mujer pisa la cabeza a la Serpiente. La corona de 12 estrellas serían las 12 tribus (ya dijimos en otro post que el numero de 12 apóstoles viene de aquí), porque ya en Gn 37 9 aparecen en el sueño de José.

4. Las dos Bestias del capítulo 13 serían el Emperador Romano (la que viene del mar y tiene poderío sobre toda raza, lengua, pueblo y nación, Ap 13 7) y la apostasía (la que viene de la tierra y habla como una serpiente, Ap 13 11) que se encarna en el falso profeta de Ap 16 13 y que invita al culto al Emperador (Domiciano quiso restaurarlo). No tiene por qué ser un profeta en concreto, sino la clase sacerdotal pagana, en general. El Diablo, la Bestia del Mar y el Falso Profeta forman la "trinidad satánica", ya que se pueden observar muchos paralelos con Dios Padre-Hijo-Espíritu Santo. Respecto a la famosa cifra 666 es como un acertijo que realmente se ha tardado mucho en descifrar. Realmente es la suma de los valores de las letras de las palabras "Nerón César" pero escritas con el alfabeto hebreo, en vez del griego:
NRON QSR = 50+200+6+50+100+60+200. La cabeza que es "herida de muerte", pero revive (Ap 13 3) podría ser Nerón, cuyo espíritu revive en Domiciano que vuelve a perseguir a los cristianos. Hacia finales de siglo se corrió la voz de que Nerón había resucitado, cuando varios impostores se hicieron pasar por él.

5. La visión de la Gran Ramera (capítulo 17) que se sienta sobre siete cabezas son las siete colinas sobre las que se asienta Roma, y también son siete emperadores ("siete reyes"), que a título tentativo podrían ser: Augusto, Tiberio, Calígula, Claudio, Nerón ("cinco han caído"), Vespasiano ("otro es") y Tito ("ha de durar poco": sólo duró dos años). No se tienen en cuenta los tres emperadores que duraron tan solo unos meses, entre Nerón y Vespasiano, durante el año 69, el llamado "Año de los Cuatro Emperadores". Evidentemente, el Apocalipsis fue escrito durante el mandato de Domiciano -sucesor de Tito-, por lo que se trata de una profecía "posterior al evento"."Y la Bestia, que era y ya no es, hace el octavo, pero es uno de los siete" (Ap 17 11) se referiría al propio Domiciano, que dio carta blanca para que los gobernadores que lo consideraran conveniente persiguieran a los cristianos. Domiciano puede considerarse uno de los siete, puesto que Vespasiano era el padre de Tito y Domiciano. También en ese sentido se puede entender que Vespasiano "aún es" puesto que su dinastía aún gobierna. Hubiera sido más fácil decir "ocho emperadores" pero la obsesión del autor por el número siete hace que lo presente de este modo. La destrucción de esta Ramera (Roma) o nueva Babilonia se describe en los capítulos 17, 18 y principio del 19. El tema del matrimonio de las "Bodas del Cordero" (Ap 19 7) está tomado de Oseas: la infidelidad de Israel es comparada con la prostitución.

6. El resto del capítulo 19 narra la derrota del Falso Profeta y el Emperador, junto con todos los reyes de la Tierra. El Dragón no ha sido aún aniquilado, sólo encadenado por mil años. Esta es la doctrina del Milenarismo, que aparece en otras obras judías contemporáneas, como el 4º libro de Esdrás y el Apocalipsis Siríaco de Baruc (apócrifos del Antiguo Testamento). Actualmente la Iglesia lo interpreta de forma simbólica como el tiempo que ha de transcurrir entre la finalización de las persecuciones y el fin del mundo, pero originalmente era un Reino de prosperidad material, del que sólo disfrutarán los creyentes en el Mesías. En efecto, en Ap 20 4 se afirma que sólo resucitarán los mártires en este momento, y después de los mil años, todos los demás (Ap 20 13). Esta doctrina del Reino de los Mil Años intenta sostener la creencia judía en una restauración del Reino de Israel (ver post). Después de los mil años, el Dragón es soltado de nuevo para reunir a todos los paganos, que han estado durante ese tiempo rodeando al Reino de Israel, sin atacarlo. Se desata el combate final y la destrucción de todo mal.

7. El capítulo 21 describe la Nueva Jerusalén, en la que ya no hay tiempo (representados por el Sol y la Luna) ni mal (representado por el Mar) ni Templo (en alusión a la destrucción del Templo en el año 70 y la sustitución de los sacrificios por el único sacrificio de Jesús).


En conclusión, el retraso en la anunciada Segunda Venida de Cristo hizo que los cristianos se relajaran en sus costumbres, lo que propició la aparición de literatura "apocalíptica", anunciando un fin de los tiempos lleno de calamidades, con la intención de amedrentar a los creyentes. Pocos argumentos tiene el que recurre al temor para convencer, porque si los creyentes encuentran su felicidad presente en Jesús, los anuncios del fin del mundo están de más.

Y eso es todo por hoy. Como siempre, podéis añadir cualquier comentario en el grupo de facebook "origen del cristianismo".


El presente post se ha desarrollado en base al libro de A. Piñero "Guía para entender el nuevo testamento" al que se han agregado muchas ideas de diversa procedencia.

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